La provincia de Manitoba, ubicada en Canadá, ha empezado a limitar temporalmente los nuevos proyectos de minería de criptomonedas debido al potencial aumento en la demanda de electricidad.
De acuerdo con reportes oficiales, el gobierno de la provincia ha establecido una moratoria de 18 meses para las nuevas operaciones vinculadas a la minería de criptomonedas. De este modo, pretenden anticipar un posible colapso en la red local de energía debido al elevado consumo de los proyectos mineros.
Según lo informado, la medida no afectará a los proyectos existentes. El objetivo que persigue la decisión es frenar las nuevas solicitudes de operaciones de ese tipo en la localidad, impidiendo que más mineros se conecten a la red eléctrica. Es así debido al potencial impacto negativo que provocaría en la comunidad.
Al menos 17 nuevos operadores han presentado solicitudes a las autoridades de Manitoba por un total de 370 megavatios de electricidad. Eso supera la mitad de la energía producida por la central hidroeléctrica que alimenta a esa provincia y que entró en funcionamiento este año.
Manitoba es un lugar atractivo para los mineros de debido a su energía barata. Alimentado principalmente por fuentes hidroeléctricas, la provincia tiene las tarifas de electricidad más bajas de Canadá, después de Quebec.
Cuestionamientos del gobierno de Manitoba
Está previsto que la suspensión se extienda por un año y medio, concluyendo en 2024. Lo que es necesario remarcar es que no afectará a las 37 operaciones mineras actualmente activas en la provincia, según los informes.
Hablando sobre la decisión, el Ministro de Finanzas de Manitoba, Cameron Friesen, el funcionario del gobierno responsable de la empresa estatal Manitoba Hydro, argumentó que la cantidad con frecuencia reducida de puestos de trabajo que crean este tipo de operaciones no justifica el elevado gasto de energía
“No podemos simplemente decir: ‘Bueno, cualquiera puede tomar cualquier [energía] que quiera tomar y simplemente construiremos represas. Puedes estar utilizando cientos de megavatios y tener un puñado de trabajadores. Manitoba Hydro no puede tomar decisiones discrecionales sobre a quién conectar.”
Se espera que una revisión del gobierno analice el impacto económico de las criptomonedas y la necesidad de un marco regulatorio para aprobar nuevas conexiones grandes a la red, aunque no se detalla un cronograma.
Se suma, además, una deuda masiva que tiene Manitoba Hydro y que se ha triplicado en los últimos 15 años. La empresa tomó préstamos para construir dos nuevos megaproyectos por un total de 3,700 millones de dólares canadienses (2,750 millones americanos). Alrededor del 40% de las tarifas de servicios públicos de los consumidores se destinan al servicio de la deuda.
El antecedente Nueva York
Manitoba es la más reciente jurisdicción que toma medidas para frenar la minería de Proof-Of-Work (PoW) debido a su alto consumo de energía. A principios de este mes, la empresa de energía hidroeléctrica de Quebec solicitó al gobierno que suspendiera la asignación de energía para la minería de criptomonedas, debido al aumento “significativo” en la demanda.
Mientras, en Estados Unidos, el gobierno de Nueva York promulgó la semana pasada una moratoria de dos años para la minería PoW debido a las preocupaciones sobre su impacto medioambiental.
Kathy Hochul promulgó la legislación sobre la minería de criptomonedas con el protocolo Proof-of-Work (PoW). La legislación impondrá una moratoria de dos años a las empresas de criptominería que buscan nuevos permisos para adaptar algunas de las plantas de combustibles fósiles más antiguas y sucias del estado a operaciones de minería digital.
También requiere que Nueva York estudie el impacto de la industria en los esfuerzos del estado para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero.
Durante los dos próximos años, únicamente la minería basada 100% en energías renovables estará permitida en Nueva York. Hace cuatro meses, el Senado de Nueva York aprobó un proyecto de ley que apuntaba a regular en el mismo sentido. Se trató de un esfuerzo por abordar algunas de las preocupaciones ambientales en torno a la extracción de criptomonedas.
